martes, febrero 20, 2007

Tengo, y no tengo ganas de escribir. Tengo ganas de decirle al mundo entero que todo es una mierda, pero eso ya lo ha dicho mucha gente en mil diferentes maneras en diez mil diferentes oportunidades. Quiero gritarle al mundo que estamos llevados del putas porque se nos olvido lo que es vivir, quiero que todas las presentadoras de farándula se callen, y de paso me las quiero también comer. Quiero que la plata deje de ser un dios y se convierta en lo que es, un medio, quiero salir de la cárcel en la que se convirtió el trabajo, y quiero empezar a disfrutar haciendo lo que me apasiona, que es lo mismo que trabajar pero sin horarios, jefes, ni transmilenios hasta las putas tetas a las siete de la mañana y a las siete de la noche, quiero no estar acá hoy, un domingo a las cinco de la tarde, escribiendo en un maldito computador, preocupándome porque mañana a las ocho de la mañana debo entregar un puto informe que se tiene que ir para Estados Unidos, quiero estar rascándome las pelotas de un lado para otro, viendo a steven seagal, a jackie chan o a van damme, quiero ir a cine con una mujer que valga la pena, que me entienda cuando llego mamado de trabajar doce hijueputas horas al día, que quiera a mi perra, que no me diga como vestirme y que me acompañe en las buenas y en las malas, quiero una mujer que no se empute cuando le digo que comprar ropa es el peor plan del mundo, que el futbol es más que 22 guevones corriendo en una cancha detrás de un balón, que ver a Ronaldiho es como comprarse toda la ropa del mundo, y mejor; que la cerveza engorda pero que es medicinal, quiero una mujer que use tenis adidas, que se ponga busitos de capucha, que le guste leer y que le guste la buena música, que me haga reír, que deteste a las presentadoras de farándula pero que este tan buena que cualquiera de ellas, que no meta, que respete mis convicciones y que me enseñe. Pero que mierdas, el reporte sigue teniendo que estar ahí a las 8 de mañana, y también me tendré que embutir como un salvaje en alguno de esos putos buses rojos, tampoco existe una mujer en el mundo que valore a Ronaldiho y que este buena, y que además sea inteligente…Tendré que cerrar este memorial de agravios, y volver a archivo y Word y Excel en inglés, y perderme la película que me he visto cincuentayunmil veces en el canal caracol. No voy a ir a cine, no voy a ser libre, y aunque alguna vez me importo, hoy el mundo me vale mierda.